En 1966, el programa de ascensiones de la Rama de Montañismo de la Universidad de Chile, realizó una expedición en la región de Aysén, para la ascensión del Cerro Castillo y de la Torre Norte del Cochrane en el macizo San Lorenzo. 

La expedición se dividió en dos grupos. Uno que se dirigió al Cerro Castillo y que estuvo integrado por Gastón Oyarzún, Osvaldo Latorre, Antonio Marcel y Raúl Anabalón, mientras que el segundo grupo estuvo, que estuvo por Eduardo García, Luis Latorre y Erling Villalobos, se dirigiría a la Torre Norte del Cochrane. 

Ya en la región de Aysén, y tras algunas gestiones para la colaboración de la Gobernación de Aysén, fueron trasladados por Ernesto Hein. Fueron alojados por colonos del Lago Vargas, José Santos y Octavio Vargas, quienes también colaboraron con caballos y pilcheros para encontrar un paso hacia el lago O´Higgins, así llegaron hasta la casa de José Fuentes, quien los guió durante 3 días junto a su hijo Vicente en la dificultosa zona. 

Durante el recorrido tomaban notas y elaboraban informes. Así, fueron avanzando la ruta de Los Ñadis, Barrancos y rodeando los lagos Largo, Juncal y Chacabuco, tomando el valle de los ríos Salto y Tranquilo para llegar donde los Vogt, quienes también colaboraron para que puedan continuar la exploración. Contaban con un equipo de escalada básico y se enfrentaron a un territorio inexplorado y con las dificultades propias de la Patagonia.

Pasados los días y visualizada la ruta hacia la cumbre, montaron campamentos sobre el glaciar. Hacia el oriente contemplaban el monte San Lorenzo, el macizo de hielo que fue escalado por primera vez en 1943 por De Agostini. Otro campamento quedó instalado en el filo que une la Torre Norte con las estribaciones ponientes del San Lorenzo, desde donde se podía identificar las posibles vías de ascensión. 

Sobre el éxito de la ascensión, la que no estuvo exenta de inconvenientes, pero que significó un hito para el alpinismo chileno de la época, Erling Villalobos relata: “Habíamos coronado la expedición universitaria con dos primeras ascensiones de gran magnitud”.

Quienes ascendieron el Cerro Castillo ya habían regresado a Santiago luego de lograr hacer cumbre. El grupo que subió la Torre Norte del Cochrane fue entrevistado por los medios locales y los resultados de la exploración fueron informados a las autoridades regionales de la época. Ambas exitosas ascensiones serían catalogadas, con el paso de los años, como las primeras ascensiones de categoría internacional.